jueves, 1 de agosto de 2002

BASES mínimas para planificar en ciencia y tecnología en el marco de una POLÍTICA DE ESTADO

BASES mínimas para planificar en ciencia y tecnología en el marco de una POLÍTICA DE ESTADO

                                                                                             Buenos Aires, Agosto  de 2002.

Consideraciones Generales
El desarrollo científico y tecnológico (CyT) es una herramienta estratégica en el crecimiento de los países y consecuentemente en el bienestar de sus habitantes.  Por lo tanto, la implementación de una POLÍTICA DE ESTADO en CyT es fundamental para el desarrollo de nuestro país como nación independiente. Esto es, políticas con consensos amplios que tengan continuidad, independientemente de las administraciones de turno.  
Esto, de distintas maneras, ha sido expresado en reiteradas oportunidades por investigadores científicos y tecnológicos, autoridades del sector CyT, legisladores, y autoridades nacionales y provinciales del más alto nivel.
Además, se ha manifestado que un cambio estructural del sistema de CyT no debe limitarse a aumentos presupuestarios, a una mejor administración de sus organismos, o a una mayor transparencia en algunos de sus procedimientos, que aunque necesarios, son insuficientes.
Sin embargo, históricamente todas estas intenciones no han sido más que reflejos espasmódicos, carentes de perseverancia e ineficientes para implementar seriamente la organización del sector CyT en el marco de una POLITICA DE ESTADO. 
Se podría argumentar que esto ha sido producto del desinterés, la negligencia o la incapacidad de las diferentes administraciones. Sin embargo, para el análisis objetivo del problema, otras razones también deberían tomarse en consideración.   
En efecto, la falta de continuidad en la planificación ha sido una de las características del sector CyT en nuestro país. Esa falta de continuidad se debe, principalmente, a que la organización en CyT ha sido siempre el producto de propuestas individuales, de grupos reducidos, o de un partido político, pero nunca a través de un consenso social que asegure la permanencia de los objetivos fijados.  
Esa falta de continuidad en la acción a través de las diferentes administraciones es una de las causas principales de la debilidad crónica del sector científico-tecnológico argentino. Por lo tanto, es claro que a través de una planificación implementada por núcleos o ámbitos de las características antes mencionadas, probablemente nunca podremos conseguir una organización en CyT en el marco de una POLITICA DE ESTADO.
De esto se desprende que es necesario pensar y debatir acerca de otras formas de organización.  
Una POLITICA DE ESTADO en CyT debe tener como un eje fundamental de su accionar la solución de las diferentes demandas sociales y las necesidades estratégicas como país, en un ámbito que le ofrezca continuidad a la ejecución de planes y/o proyectos. Por lo tanto, los planes o proyectos que se decidan promover deberán contar con un consenso social amplio, tener financiación asegurada, y ser independientes del poder político de turno.
En consecuencia, los objetivos que se planteen en el contexto de una POLITICA DE ESTADO deberán hacerse sobre la base de unacuerdo multisectorial entre partidos políticos, instituciones científicas, organizaciones gremiales, facultades, universidades, organizaciones no gubernamentales, científicos, tecnólogos, funcionarios, legisladores y empresarios, entre otros. Además, estos sectores deberán asumir públicamente el compromiso de defender y garantizar la ejecución de los planes por el poder político circunstancial.
En ese ámbito multisectorial se debería definir, y sólo a modo de ejemplo; qué tecnologías se deben desarrollar en el país, que proyectos desarrollar, cómo, con quién, adónde y de que manera se puede vincular al sector CyT con la sociedad; cómo se puede integrar CyT con la producción; cuál sería una forma genuina de financiar al sector sin caer en la crónica solicitud de préstamos externos; de que manera y en que ámbito el sector de CyT puede asesorar al Estado en forma permanente, evitando recurrir a consultorías extranjeras; si se deben producir, por ejemplo, vacunas y medicamentos para afrontar decorosamente las demandas sociales; cómo vincular los planteles de investigación básica con los de investigación aplicada y los tecnológicos; entre otras cosas.  
No hay manera de planificar en ciencia y tecnología fuera del marco de una POLITICA de ESTADO
La implementación de una POLITICA de ESTADO podría lograrse con un sector de CyT participativo, que impulse la propuesta y asuma responsabilidades sociales, que se organice seriamente e incorpore a otros sectores sociales, y que mantenga continuidad y perseverancia en la acción.
Este texto se difunde a: Presidencia de la Nación, Jefatura de Gabinete, Ministerios de Educación, Salud, Defensa, Cancillería, Ciencia y Tecnología, Ministerios de Salud Provinciales, ANMAT, Diputados y Senadores Nacionales, Legisladores y Funcionarios Provinciales y C.A.B.A., Academias Nacionales, Instituciones del Sector CyT (INTA, INTI, CNEA, CONICET, SEGEMAR, CONAE, CITEFA, INIDEP, SENASA, INA, ANLIS-Malbrán, UTN), Facultades de Universidades Nacionales, ONG, Laboratorios de PPMV, etc).