miércoles, 2 de mayo de 2012

Becarios - Subsidios - INTI


INTRODUCCIÓN
En la gacetilla anterior hacíamos referencia a la fragmentación institucional como uno de los problemas estructurales más importantes del sector CyT y la necesidad de que desde el Ministerio de CyT se abriera una discusión pública amplia y profunda para intentar resolverlo. Ver en: http://www.grupogestionpoliticas.blogspot.com.ar/2012/04/problema-estructural-en-cyt.html .

Ahora veamos otros tres problemas que tenemos en CyT: Becarios - Subsidios - INTI.


BECARIOS
En las convocatorias 2011 del CONICET para acceder a Becas posdoctorales o a ingresar a la Carrera del Investigador Científico, luego de algunas negociaciones los guarismos finales señalaron que más de 1500 becarios doctorados en distintas disciplinas quedaron marginados del sistema, muchos de ellos recomendados por las Comisiones Asesoras. Siendo que actualmente hay alrededor de 8.500 becarios en CONICET, de no tomarse medidas esta sangría se repetirá, por lo menos, hasta el año 2019.


Ahora, sobre la base de los números actuales, hicimos un cálculo muy simple para ver cuál había sido la inversión pública mínima en la formación de esos becarios. Para ello, tomamos sólo el estipendio (así se llama) que reciben los becarios. Veamos.

Si consideramos que un becario recibe $ 5000 por mes por su trabajo, por año recibe $ 60.000.

Por lo tanto, en 6 años (promedio entre 5 y 7 años que es lo que dura una beca) el becario recibe $ 360.000

Si ponemos las cifras en dólares (1 U$D = $ 4,45), vemos que la inversión en la formación de un becario durante 6 años fue de, por lo menos, U$D 80.898  

Y la inversión por 1500 becarios en 6 años fue de 121.348.314 dólares.

En ese valor de más de 120 millones de dólares invertidos no se consignan insumos utilizados, cursos, congresos, etc. Obviamente, tampoco consideramos lo invertido para alcanzar un título universitario, secundario y primario, montos que desconocemos pero que darían la cifra de la inversión en la formación de una persona desde el inicio de sus estudios hasta la máxima formación académica, un doctorado.

Más allá de la precariedad de estos números -por mínimos-, los mismos permiten ver una situación preocupante que debería invitar a la reflexión, tanto como para empezar a tomar algunas decisiones y revertir estas consecuencias. Porque si hay inversiones muy importantes en la formación de profesionales calificados, como sociedad debemos plantearnos cómo canalizarlos después.

De otra manera, estaremos asistiendo pasivamente a que investigadores que se formaron en el país y que, obviamente, deberíamos retener, no les dejemos más alternativas que la emigración (fuga de cerebros) o dedicarse a menesteres diferentes de aquellos para los que fueron formados, con las consecuencias que eso acarrea. Detalles ver en: -http://www.grupogestionpoliticas.blogspot.com.ar/2012/04/problema-estructural-en-cyt.html.


SUBSIDIOS  
Los subsidios a Proyectos de Investigación en Ciencia y Tecnología -conocidos como PICT- constituyen la principal fuente de financiación de los proyectos de los investigadores en todas las áreas del conocimiento y son otorgados, previo concurso, por el FONCyT, área de la Agencia Nacional de Promoción CyT que depende del Ministerio de CyT. Ver en: http://www.agencia.gov.ar/spip.php?article28

Desde el año 2005 hasta la fecha, los valores máximos otorgados por esos PICT están alrededor de $ 300.000 por tres años. Esto habla por si mismo de que en la actualidad, y considerando la inflación, el poder adquisitivo de los PICT actuales está alrededor del 35% de los recibidos en el 2005.

Estos subsidios habitualmente financian una beca, equipo menor, e insumos para alrededor de 5-6 personas (2 investigadores y 3 ó 4 becarios). Hay otras vías para obtener subsidios similares, pero son escasos y de menores montos.

Además, esos PICT son otorgados anualmente a, aproximadamente, un tercio de los postulantes, quedando una significativa cantidad de proyectos sin ninguna, o con muy pocas posibilidades adicionales de financiación.

Entonces, estamos asistiendo al hecho de que proyectos y grupos de investigación evaluados favorablemente por CONICET, o por el mismo FONCyT, se quedan sin ningún tipo de financiación. Esta paradoja se debería resolver, tanto como para tener un marco de coherencia.

Porque no es razonable que proyectos y planteles evaluados satisfactoriamente, luego no tengan ni un peso para poder trabajar.

Además, a estos investigadores -y becarios a cargo- luego se les exige el mismo rendimiento que a aquellos que han sido receptores de un subsidio. En efecto, a esos grupos "marginales" se los evalúa con las mismas pautas que a otros que, en algunos casos, reciben hasta millones de pesos. Así, a unos y a otros se los premia o castiga según el número y calidad de publicaciones, del índice de impacto de las revistas en donde publica sus trabajos, o de si formaron recursos humanos, entre otras cosas.  

Por eso, las evaluaciones deberán empezar a contemplar otros contenidos como, por ejemplo, el soporte financiero recibido. Porque no se puede juzgar con la misma vara a aquellos proyectos/ investigadores que tienen una financiación razonable o muy buena, con otros que, también evaluados favorablemente, no reciben nada.

Y por un principio de equidad elemental, para juzgar con la misma vara hay que dar las mismas posibilidades. Así, a los que corren con una Ferrari no se les puede exigir lo mismo que a los que tienen un Ford T, o a aquellos que corren de a pie. De otra manera, habrá hijos y entenados.   

La solución a este problema es central -si es que CyT es considerada un área estratégica-. De otra manera, esta primavera que se está viviendo en CyT -para algunos- puede concluir en un colapso para muchos otros.

Una salida rápida y razonable sería que todo proyecto evaluado favorablemente vaya acompañado por un subsidio básico, tanto como para que, por lo menos, todos tengan la posibilidad de trabajar.

De otro modo, de alguna manera estaremos reeditando a Oscar Varsavsky que, hace más de 40 años, decía que el direccionamiento en las asignaciones de recursos puede llegar a producir una "selección natural" de algunos temas y/o grupos, en desmedro del conjunto.

Interesados en las opiniones de Varsavsky sobre este tema ver el Capítulo III: El Cientificismo, en la versión on line de su libro: "Ciencia, Política y Cientificismo" - http://es.scribd.com/doc/76622477/varsavsky-Ciencia-politica-y-cientificismo-exactas -.


CONCLUSIONES
En varias gacetillas hemos manifestado que en los últimos años hubo avances notorios en CyT como la creación del Ministerio de CyT, las mejoras salariales, el mayor número de becas ofrecidas, la mayor cantidad de subsidios otorgados así como los montos asignados a proyectos de investigación o los dedicados a obras de infraestructura. Sin duda, hechos importantes y necesarios que, además, señalan la voluntad política del Gobierno de impulsar al sector CyT.

Sin embargo, hay problemas en distintos ámbitos y el de los subsidios y los becarios merecen un trato urgente, porque no son cuestiones superfluas.

Por el lado de los becarios doctorados se deberían abrir posibilidades o alternativas necesarias para desarrollar proyectos nacionales/ regionales -hoy poco presentes-, destinados a resolver necesidades públicas, en donde los distintos organismos tecnológicos deberían ser los receptores naturales.

Y por el lado de los subsidios, los proyectos bien calificados no pueden quedar sin una financiación mínima o básica. Tanto como para evitar el desmantelamiento de grupos de trabajo que, habitualmente, lleva años formar, y consolidar.


INTI
El Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) es un organismo autárquico del complejo CyT argentino que depende del Ministerio de Industria.

En numerosas oportunidades -durante años- hemos manifestado que la base para tener un sistema CyT potente y con inclusión social, es necesario un desarrollo tecnológico basado en la atención de necesidades públicas y que, en ese marco, el INTI era un organismo central para el diseño y aplicación de políticas en el área. Esencialmente por su nivel tecnológico y por lo multidisciplinario de sus actividades. Opinión reflejada sucintamente en: http://www.grupogestionpoliticas.blogspot.com.ar/2012/02/que-pasa-en-el-inti-cual-es-el-futuro.html .

Por otra parte, en diciembre de 2011 hacíamos referencia a que, luego del cambio de autoridades, en el INTI se estaban expresando algunos problemas gremiales e institucionales. Ver en: http://www.grupogestionpoliticas.blogspot.com.ar/2011/12/conflicto-en-inti-el-instituto-nacional.html.

Hoy, a cinco meses del cambio en la conducción, lamentablemente seguimos asistiendo a manifestaciones masivas de los trabajadores del INTI. Pero las demandas no se limitan a reclamos salariales. Las más potentes están relacionadas a la orientación, o a los objetivos actuales de la Institución.

En efecto -lo dicen ellos mismos- lo que está en juego es, esencialmente, definir el rol estratégico de la Institución. Por eso, el compromiso de los trabajadores del INTI es reconfortante, admirable y merece acompañamiento. Porque ese objetivo demuestra una clara pertenencia institucional que, por otra parte, se refleja en los distintos Centros Regionales como los de Córdoba, Patagonia Norte, San Luis, Mar del Plata y Rafaela, etc, así como en ámbitos científicos, gremiales y políticos. Ver en: http://intienlucha.blogspot.com.ar/.

Y tienen razón, el INTI no puede reducirse a ser soporte de empresas sino que, además, debe ser una institución líder en investigación tecnológica. Porque, parafraseando al Ing Enrique Martínez en su carta dirigida a la ministra Débora Giorgi:



Grupo de Gestión: Alonso-Romanowski S - Cid JA - Cravero C - De Filippo J - De Sousa Frade S - Fiamberti H - Furnari JC - García AP - Ghilarducci A - Giordano M - Gubertini MT - Hermida EB - Herrera M - Ielpi L - Iriondo M - Isturiz MA - Lamberti Y - Landoni MF- Lemos DR  - Massarini A - Milana JP - Nonzioli AC - Otero AM - Palermo M - Pérez O - Ravelo A - Rearte B - Recavarren MI - Rietti S - Rivero S - Rofman A - Sabbatini ME - Sasiain MC - Schattner M - Yokobori N.


Este texto se difunde a: Presidencia de la Nación, Jefatura de Gabinete, Ministerios de Educación, Salud, Defensa, Cancillería, Ciencia y Tecnología, Ministerios de Salud Provinciales, ANMAT, Diputados y Senadores Nacionales, Legisladores y Funcionarios Provinciales y C.A.B.A., Academias Nacionales, Instituciones del Sector CyT (INTA, INTI, CNEA, CONICET, SEGEMAR, CONAE, CITEFA, INIDEP, SENASA, INA, ANLIS-Malbrán, UTN), Facultades de Universidades Nacionales, ONG, Laboratorios de PPMV, etc).